MI TIO FELIZ Y MI TIA LOLA

Ahora que viene la navidad,acabo de recordar algo que me ha hecho ser humano.

Despues de los regalos de Reyes en casa de mi padres, los nervios para ver lo que nos habian echado en casa de mi tio Feliz.

La entrada al galope al portal y el suban por la escalera del portero Manolo.

No eran regalos.Era primero el respeto hacia un niño,que,cuando me abría la puerta, tras las gafas y la mano tendida como si fuera un hombre, mi tio Feliz me ofrecia.Era el chocolate humeante sobre la mesa del salon que traia mi tia Lola de su cocina.El niño Jesus en la habitacion de mis tios,casi de verdad y al que tenia miedo cuando pasaba al baño.

Las peliculas de super 8 que veiamos todos,riendonos por el ojo negro del niño que miraba el tubo de escape o por el coche que se rompia del gordo y el flaco o en fin;por todo lo que nos enseñaba, enseñando el cine que el habia visto.Esa algarabia en definitiva que ocurria cuando la niñez era niñez.Y los sellos que me enseñaba convirtiendose en niño el.

Y el verano en Cercedilla.

El calentador de coñac que mi tio usaba para esa copa tan enorme que luego tomaba con felicidad y el puro que encendia con parsimonia.

Y las meriendas que nos ponia mi tia Lola.

y las partidas de pin-pon con mi primo Feliz.

y las clases de matematicas con mi primo Juan,al que aseteaba a preguntas, menos de lo que tenia que estudiar y a todas me respondia.

Y la belleza increible y pecosa de mi prima Clara.

Y la distancia que ponia mi prima Pilar con su inteligencia, ante nuestra crueldad.

Y la niñez de mi prima Loli.

Todo eso acabo de recordar,como si fuera un sueño feliz convertido en realidad.

Por eso jamas ninguno ha muerto,porque sigue siendo real.